En esta primavera que se aproxima la prevención, es el primer paso para evitar que la ola de calor que vamos a experimentar cause daños a nuestras mascotas
A tener en cuenta
No hay que olvidar que, si las personas estamos expuestas a esta patología, los perros son aún más sensibles al calor que nosotros; su sistema de reducción de la temperatura corporal es algo menos sofisticado que el de los humanos.
A diferencia de los humanos, los perros no transpiran mediante todo el cuerpo, sino que regulan el exceso de calor por algunas partes, como la boca -mediante el jadeo-, por las orejas, la cara, o sudando a través de las almohadillas. Tampoco pueden bajar la ventanilla del coche para que les entre el aire, ni abanicarse, o decir que tienen calor.
12 claves para prevenir los golpes de calor
Sobre el golpe de calor, podríamos decir que “prevenir es mejor que lamentar” porque, siguiendo unos sencillos consejos, podemos ahorrarnos más de un disgusto, que en ocasiones puede llegar a ser fatal.
1. Agua limpia y fresca, siempre: esté donde esté, el perro debe tener a su disposición agua limpia y fresca en todo momento
.2. Ventilación en el hogar: también es importante que, en casa, el can pueda estar en un lugar amplio, con buena ventilación, para que se encuentre lo más fresquito posible.
3. Sombra, que no falte: durante la canícula, hay que buscar siempre una buena sombra y perseguirla persistente mente, como ella lo hace con nosotros.
4. Comida, a la fresca:la hora de la comida, conviene que coincida con los momentos del día menos calurosos, como la primera hora de la mañana o al anochecer.
5. Posponer el ejercicio:postergar la actividad física, para los momentos en los que la solana no puede perjudicar la salud de nuestro perro, es una de las mejores medidas que podemos tomar para no añadirle aún más calor.
6. Perros de pelo corto, los más vulnerables: ¡ojo con estos canes!, el hecho de tener el pelo corto, no significa que estén más fresquitos; precisamente, las razas de pelo corto son las que corren más riesgo ante las temperaturas extremas y con las que hay que tener más precauciones; curiosamente, el pelo largo es un buen aislante, tanto para el frío como para el calor.
7. Paseos, sí, pero con precauciones: antes de salir, conviene que el perro beba agua para que esté hidratado; procura no pasear con tu perro durante las horas de más calor del día; si no tienes más remedio que salir para que haga sus necesidades, acorta el paseo y mira de ir por lugares sombreados; en cuanto el can orine o defeque, lo mejor es volver a casa, donde tendrá preparada agua fresca y limpia en su bebedero; lo ideal es sacarlo a pasear bien temprano por la mañana y a última hora del día, cuando el ambiente está relativamente más fresco.
8. Nunca solo en el coche: es una negligencia de consecuencias letales; la asociaciones de animales no se cansan de repetir cada verano que dejar a una mascota en el interior del coche puede provocarle la muerte; ten en cuenta que en tan solo media hora, la temperatura del interior del vehículo puede aumentar 20º sobre la del exterior, lo que supone dejar al animal, prácticamente, en un horno.
9. Perro encerrado en un vehículo, ¿qué hacer?: si eres testigo de que un perro está en el interior de un vehículo, solo, y con altas temperaturas, lo que se recomienda en estos casos es llamar al 911, para que los agentes se encarguen de todo lo necesario para socorrer al animal.
10. Toallas, hielo y agua, si viajas con tu perro:si vas a salir en coche con tu perro, no olvides incluir en tu lista algunas toallas, hielo y agua; serán útiles ante cualquier signo de acaloramiento de tu can; si esto ocurre, él podrá descansar sobre la toalla humedecida o poner sus patas encima; los cubitos de hielo van muy bien para refrescar las almohadillas y la zona de la nariz.
11. Aprovechar los recursos hídricos: quienes vivan en una casa con jardín, pueden invitar al can a retozar bajo el agua de los aspersores; se divertirá a la vez que combatirá el bochorno; a falta de estos sistemas de riego, un buen manguerazo, de vez en cuando, también lo aliviarán del ardor veraniego.
12. Cachorros y perros ancianos: en días sofocantes, los canes, a estas edades, suelen acusar el calor de manera especial; en casa, es buena idea poner toallas húmedas sobre el suelo, donde puedan descansar; sin olvidar bajar las persianas y abrir las ventanas para que pase el aire pero no entre el sol.